jueves, 19 de agosto de 2010

Imprescindible

Ya asoma el nuevo día, esplendoroso como alto guayacán, ya las causas prefiguran el pasto y la flor, ya apresta el tigre la danza y relampaguea el río. Nacen madreselvas, astromelias, enredaderas, abetos, verdolagas, pinos, malvas, eucaliptos. Los pájaros –flechas febriles de Eurito- envuelven de melodía la selva. El campesino que sabe de lo imprescindible acude a su antigua lengua de tierra y fruto; al alba que no produce sombras. Pero al finalizar el día cada cosa, cada ser morirá a propósito para bautizarse en el incienso reciente de la aurora. Y como siempre declinarán: la naturaleza canta y ruge a la vez.

1 comentario:

  1. bienvenido al sitio blogger... importante para abrirse al mundo, espero que estos pájaros no sólo vuelen al sur... la rosa de los vientos se infinite.

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